Juegos Salvajes (1998) - Película completa en español

La dirección de McNaughton no disimula sus intenciones: esto es pulp estilizado, consciente de su artificio, con escenas que rozan lo paródico (ese infame trío en la piscina sigue siendo una cumbre del exceso erótico de la era post-Basic Instinct). La música de George S. Clinton aporta una atmósfera inquietante, casi lujuriosa, mientras que la cámara se regodea en cada cruce de miradas, cada gota de sudor y cada tipo de plano que esconde más de lo que muestra.

Pero lo verdaderamente brillante de Juegos Salvajes es su estructura narrativa: lo que empieza como un drama judicial adolescente muta, acto tras acto, en una farsa criminal cada vez más retorcida, con revelaciones que obligan al espectador a reinterpretar todo lo visto hasta entonces. Pocas películas de la época se atrevieron a jugar tanto con las expectativas como ésta. ¿Es una obra maestra? No. ¿Es cine de calidad? Discutible. ¿Es divertidísima, retorcida y descaradamente entretenida? Absolutamente. Juegos Salvajes es ese tipo de película que nunca pasaría desapercibida. Y por eso, más de 25 años después, sigue generando debate, guiños cómplices y algún que otro suspiro nostálgico.